EL ADIOS A LA FRIVOLIDAD FASHIONISTA

• La moda desde la época de crisis económica, donde lo chic es ver niñas ricas vestidas de niñas pobres y bohemias.

La economía ha dado paso a una serie de cambios estructurales en todos los aspectos de la vida diaria. Nada quedó a salvo, desde la manera de alimentarse hasta la de vestirse.

Precisamente en el ramo de la moda, el utilitarismo esta en auge al tiempo que una crisis mundial afecta a todos los sectores sociales.

En la pasada semana de la moda en Paris, la tendencia marco una gran desviación de la frivolidad adquirida por la industria de la alta costura en los últimos tiempos.

A lo largo de las pasarelas de Céline, Chloé y Ralph Lauren, prendas básicas en tonos khaki, pantalones en telas ligeras y piezas en mezclilla le han dado el toque mas básico a la ultima temporada primavera-verano.

En respuesta a una devastación económica latente, las principales casas de moda han pensado en crear prendas básicas, con el único fin de hacer con estas un guardarropa fijo.

En otras palabras, la pieza es creada como un must general; no como un mero gusto por tenerlo sino como una necesidad. De ahí nace que las prendas puedan formar parte de un guardarropa fijo, y no que con el paso de la temporada y las colecciones se tenga que desechar.

La austeridad con la que se vive actualmente no permite el paso a la moda enardecida de detalles futuristas ni extravagantes, ya que el presupuesto se ha recortado y las costumbres han cambiado. Ahora, la mujer se queda en casa a descansar, por tanto el outfit debe ser cómodo y practico.

En ejemplo concreto hablando del denim, podemos además sumarle el hecho de su resistencia y practicidad.

La mezclilla comenzó a ser usada en la confección de ropa de trabajo durante la edad media. Su popularidad llegó por la resistencia que existía en dicha fibra, al grado de llegara a ser usada en la realización de velas para barcos y tiendas de campaña, de toldos y lonas. De ahí, en 1853 Levi Strauss pensó en utilizar el denim para hacer ropa de trabajo de los mineros, ropas que resistieran a la vida a la intemperie y el peso en los bolsillos del mineral encontrado. Después los genoveses se encargaron de teñir la fibra de azul con un pigmento abundante y accesible para al final quedar patentado por Strauss en 1873.

Al final podemos ver las ventajas de la fibra; una tela rígida con posibilidad de durar por años y con la ventaja de resultar en muchos casos barata. Un buen par de jeans nunca esta de mas, pero de eso a crear todo tipo de conjuntos a base del denim es una gran distancia.

De pronto la mezclilla paso de ser un básico a ser una tendencia.

Ralph Lauren, D&G, Just Cavalli y Stella McCartney este verano decidieron que este será el gran regreso de la mezclilla, algo que hace algunos años se veía imposible. Ni las camisas blancas, ni las bailarinas, no unos simples pumps… ninguna de estas prendas, por funcionales que sean llegan siquiera a hacer sombra a la pieza estrella de cualquier armario: los jeans. Son cómodos, versátiles, y la variedad de cortes, lavados y acabados hacen posible que haya uno para cada persona.

Los tonos frescos y los detalles edgy están llevando las nuevas piezas de denim de informales a creaciones dignas de salidas casuales, formales o nocturnas.

La tendencia va desde los conjuntos completos de mezclilla, hasta la combinación ganadora de la temporada: denim y blanco, al mismo tiempo podemos darle un toque trendy al usar un pantalón vaquero, estilo boyfriend y una camisa vaquera entallada para resaltar la figura.

Una de las apuestas favoritas de este verano perteneciente a la nueva temporada de D&G, falda de talle alto con volumen, cinturón, camisa vaquera, botas y pañuelo en el cuello para enfatizar el country style.

Los accesorios perfectos para la temporada son los cinturones cowboy, las botas vaqueras y las sandalias romanas.

El verdadero y único secreto esta en la combinación de tonos de mezclilla, y la única prohibición es no utilizar un tono muy oscuro con uno claro, se busca una armonía en la relación de los colores.

Por otra parte esta temporada podemos encontrar una gran tendencia con inspiración militar. El verano pasado, Céline en su presentación Resort dio a conocer estos looks refinados, que sentaron las bases para una elegancia relajada que se hizo presente en cada uno de los desfiles de la primavera. Los diseñadores optaron por tonos neutros y prendas básicas, basadas en una tendencia estilizada y sencilla. “El minimalismo se siente bien”, expreso Kate Young fashionista experta ante la nueva revolución mostrada en los desfiles.

Hoy, lo mas practico es lo que se lleva. El principio de la comodidad y el comfort en una pieza, no implica renunciar a lo mas sofisticado.

Los aires de cadencia marcial andan conquistando las pasarelas y se alistan para invadir las calles.

Las prendas estrellas con aire militar como los sacos rectos con hombreras, vestidos camiseros de algodón, las minis y los shortpants, los botines de stiletto y los cortes con escotes profundos y municiones aparecen en la tiendas de todo el mundo.

Ahora, con la ventaja de que una prenda de tendencia igual puede verse bien con accesorios de diseñador como con piezas de H&M, no teniendo que ser caras, solo buscan proveer básicos. No necesitas ir mas allá de Gap o Banana Republic, la joyería de grandes dimensiones sigue vigente, pues al momento de combinar un básico con algo muy boyish, necesitamos femineidad al full. Yves Saint Laurent, Alexis Bittar y Kara Ross crearon anillos llamativos con oro en bruto y grandes piedras sin pulir.

El equilibrio es básico y sencillo de entender, pantalones holgados con blusa ajustada, y accesorios llamativos; al contrario si tenemos una mini trendy, lo adecuado es buscar una sudadera holgada y los accesorios deben ser discretos y brillantes.

La tela ligera, las faldas con satén, y ligeras capas de organza y tul, la seda ultraligera, el algodón orgánico y la mezclilla cruda son las telas de la temporada que tienen una sola cosa en común. Cheap&Chic.

Los diseñadores se preocupan por llevar la moda a otro parámetro, no dejarlo desolado, seguir adelante aun con la tormenta en el horizonte mas próximo, y sacarle el mayor provecho a lo que se puede tener.

Es tiempo de tomar el control del guardarropa, de usar lo que uno quiera, saberlo combinar y darle el toque mas hype de los últimos tiempos, esa es la mejor manera de sobrellevar la fashion fever del verano.